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martes, 22 de noviembre de 2016

19 de Noviembre de 2016 - Mensaje de la Virgen María, Santa Lucía y San Gerardo a través del Vidente Marcos Tadeo

Jacareí, 19 de Noviembre del 2016
Transmisión de las Apariciones Diarias en vivo vía internet en la WebTV 



MENSAJE DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA


“Queridos Hijos, hoy, invito a todos ustedes a mirar más para el Cielo, a desear más el Cielo y a juntar un gran tesoro para ustedes mismos en el Cielo.



Junten un tesoro en el Cielo con buenas obras de amor todos los días, haciendo todo con amor y por amor a Jesús y a Mí, con oraciones de amor, rezando con el corazón y procurando hacer todo con verdadero amor en sus corazones.

Pidan siempre más Mi Llama de Amor, para que todo lo que ustedes hicieren, sea lleno de amor y sea fruto del verdadero amor. Que sus oraciones no sean frías pero ardientes con Mi Llama de Amor, pues, solamente la oración ardiente es aquella que es agradable a Dios y que alcanza de Dios Su Misericordia. Cuanto más ardiente sea la oración, mayor también será la gracia que Dios derramará sobre ustedes y en sus vidas.

Deseen el Cielo y junten más su tesoro en el Cielo, procurando todos los días hacer todo con la única intención de agradar a Dios que es Amor, donando sus vidas siempre más para la Gloria de Dios. 

Los Religiosos deben hacer todo sólo por Dios, todo sólo por amor a Jesús y a Mí y no colocar nunca su “Yo” y su voluntad en medio de las obras. Los Laicos, a quien le es más difícil hacer eso, pido que se esfuercen para que en todo lo que hicieren, hagan siempre todo sólo por Dios y deseando únicamente a Dios que es el fin de la vida de cada hombre. Así, ustedes juntarán grandes tesoros en el Cielo donde la polilla no roe, la herrumbre no corroe y el ladrón no roba. Y cuanto mayor sea el amor que ustedes coloquen en las obras que hicieren, sean ellas grandes o pequeñas, tanto mayor será su tesoro en la Gloria del Cielo.


Prepárense siempre más Mis Hijos para su partida de esta tierra, porque todos los hombres morirán. La muerte es la consecuencia del pecado original y un día ustedes también dejarán este mundo. La vida es corta, prepárense pues, con buenas obras, pues, no saben ni el día ni la hora en que Mi Hijo les llamará. Entonces, si ustedes estuvieren preparados cuando Mi Hijo les llame, sentirán alegría y no miedo.

A todos Yo bendigo ahora con amor y pido: “Continúen rezando Mi Rosario todos los días.”

A todos bendigo con amor: de LA SALETTE… de MONTICHIARI… y de JACAREÍ.”



MENSAJE DE SANTA LUCÍA


“Queridos Hermanos, Yo, Lucía, vengo hoy del Cielo para invitarles: “Levanten sus ojos para el Cielo, vivan únicamente por el Cielo, hagan todo por el Cielo y que el Cielo sea el único deseo y anhelo de sus corazones.”


Hagan como todos Nosotros los Santos hacíamos: “Prefieran el Paraíso, principalmente ustedes que conocieron los Mensajes de la Madre de Dios aquí y por Ella fueron escogidos para estar aquí.”

Prefieran el Paraíso que les prefirió, escojan el Cielo que les escogió, amen el Cielo que les amó.


Levanten los ojos al Cielo, principalmente en estos tiempos de la gran apostasía, en que los seres humanos se transformaron en fieras, en fieras materialistas y rabiosas, que no ven nada más de que la comida, la bebida, los bienes materiales y los placeres.

Levanten los ojos al Cielo y ayuden a todos a levantar los ojos para el Cielo también, para ver cuan grande es el Amor de Dios, cuan grande y bella es la luz de la eterna verdad de Dios, para que así, todos los hombres puedan buscar la salvación y un día puedan llegar a ella en el Cielo.


Levanten sus ojos al Cielo y levanten los ojos de los otros también al Cielo, propagando a todos, los Mensajes de la Madre de Dios y enseñando a todos a rezar el Rosario y las oraciones que Ella les dio aquí, pues, a través de esas oraciones, levantarán sus ojos al Cielo y entonces, todos desearán el Cielo, buscarán el Cielo y buscando el Cielo, dejarán para siempre las obras del pecado y de la muerte eterna. Y entonces, será el triunfo de la Madre de Dios en todos los corazones.

Continúen rezando Mi Coronilla todas las semanas.

A todos Yo bendigo con amor: de CATANIA… de SIRACUSA… y de JACAREÍ.”



MENSAJE DE SAN GERARDO


“Amados Hermanos Míos, Yo, Gerardo, Me alegro hoy por venir una vez más del Cielo para bendecirles y también para decirles: “Den su vida al Señor que dio Su vida por todos ustedes en la cruz.”

Den su vida a la Vida, que es Jesús.

Den su vida a la Vida Eterna, que es Dios.

Den su vida al Señor y Él les dará también una nueva y verdadera vida, Su verdadera vida, la verdadera vida en Dios.


Yo di Mi vida totalmente a Él, que es la Vida Eterna y por esa causa, vivo eternamente con Él en la Gloria del Cielo.

A los ojos del mundo, todos pensaban que Yo estaba arrojando fuera Mi vida, que Yo estaba perdiendo Mi vida. Y en verdad estaba pero, perdiendo Mi vida según el mundo, gané Mi vida para el Cielo, para la Vida Eterna y hoy Soy feliz eternamente con Dios y con Mi Reina Santísima en el Cielo.

Si ustedes también dan sus vidas a Dios y a la Madre de Dios, viviendo según los deseos y las órdenes de Ellos, viviendo de acuerdo con Sus Mandamientos, viviendo de acuerdo con Su Amor, ustedes también ganarán la Vida Eterna.


No se importen con aquellos que les critícan porque rezan, porque viven según el deseo de Dios y de la Madre de Dios, porque esos hablan por la boca del demonio. Quien les habla por medio de ellos es el demonio. Cuando ustedes oyen lo que ellos dicen, cierren rápidamente sus corazones y sus mentes para lo que el demonio dijo, rezando el Rosario. El Rosario será su fuerza, el Rosario será su fortaleza.

Y sigan alegres, valientes y sin miedo en el camino de la conversión, de la oración y de la salvación que la Madre de Dios les dio y llamó aquí. Todo, todo lo que ustedes pidieren por medio del Rosario y del Ayuno, ustedes obtendrán.

Con el Rosario combinado con el Ayuno, ustedes conseguirán milagros inmensos, conseguirán la conversión de muchas y muchas almas, conseguirán incluso detener castigos y flagelos que el mundo merece por sus pecados.


Continúen ayunando en los martes y sábados, rezando el Rosario todos los días y rezando Mi Coronilla todas las semanas. Por medio de ella, les daré grandes gracias.

Divulguen Mi Coronilla y la Coronilla de Lucía número tres, porque aún no se divulgó suficientemente los Mensajes que ellas contienen. Hagan eso y darán una gran alegría a Mi Corazón.

A todos Yo bendigo con amor: de MURO LUCANO… de MATERDOMINI… y de JACAREÍ.”



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